Asi es. He comprobado, tras exhaustivas investigaciones, que si combinas peligrosas cantidades de ron con una camara, el resultado es fotografia expresionista abstracta. Niños! Niñas! Intentenlo en casa! Recuerden pedirle a un adulto que les ayuden! La investigación para eliminar estas inquietudes tomaron lugar durante mis ultimos dias en La Habana. Es aqui, donde ademas de disfrutar de rones, me interese en muchas otras cosas de indole non-ronicas. La obsesión y fijación oficialista por el pasado cubano (el presente no existe y no vale la pena enfocarse en ello, pues todo esta bien! Vamos bien!) y todo lo relacionado a la palabra Revolucion (y repudio por aquello anti-revolucionario) se concentra en la literatura y prensa para adultos, pero esta no se limita a los adultos. Los niños tambien pueden disfrutar de ello! Mientras existen varias revistas, caricaturas y 'muñequitos' en general que dan tristeza, hay unos pocos que son maravillosos. Es asi el caso de Elpidio Valdez; Orgulloso y tenaz Mambise que lucha contra los españoles durante la primera revolucion cubana.
Juan Padron, el caricaturista, inventa historias divertidas y ademas le enseña a los niños sobre historia (un poco teñido de rojo y de martillos, pero historia). Su obsesión por el detalle es increible. En el departamento de David encontré una colección inmensa de libros y comics de Elpidio Valdez. Uno de los libros se dedicaba nada mas a describir y explicar todas (tooodas) las diferencias entre el armamento y el uniforme Español y el Mambise, asi tambien los alimentos, coloquialismos, expresiones y formalidades militares. Y (y esto es un inmenso Y) se toma su tiempo para dibujar o animar (pùes tambien hay peliculas animadas) personajes tirandose pedos y eruptos. Magico. Tomen eso Disney y Pixar!
Pero, Juan Padron y su Elpidio son una parte muy chiquita del aspecto global de Cuba y mi Bergaso Cubano. Se cuenta de un muchacho (tan solo un jovenzuelo, caray) que tras disfrutar de baños de azufre y espelusnantemente deliciosos relatos de un viejito bastardo, este llega a Santiago de Cuba. Ya no podria disfrutar de los helados del Copellia en La Habana (mmm...) y me aterraba el pensar que habia escuchado mas musica mexicana que musica cubana en la isla. De las casas, negocios y oficinas Compay Segundo era sutilmente sustituido por Juan Gabriel, Jose Jose y Leo Dan. Asi es, Leo Dan. Leo Dan! Por Dios! Disculparan mi atrevimiento, mas me siento justificado al decir: Leo putas Dan! Oh no... Santiago de Cuba no ofrecia nada de sabrosa musica Cubana... el sssabor! Nada. Ni un pisquita. Cuando llegamos acompañe a Theo y Danielle a buscar algun hospedaje casero donde quedarse y sin mas ni menos, esa noche compartiamos el mismo cuarto Theo, Danielle y su servilleta. Tercera rueda! Pueden apostar que si. Asi que llegada la segunda noche en Santiago, sin hacer gran revuelo, encontre otra casa donde me podian hospedar y asi dejar a los tortolitos en su nido de amor. El tercer dia Santiaguense seguimos paseando por la ciudad juntos. En tres dias descubri muchas cosas. He aqui una lista pequeña.
1. Santiago es caribeño criollo mientras que Habana y aledaños son mas españoles.
2. Las caribeñas criollas son... mas.
3. El alcoholismo es general en toda la isla.
4. Al Holandes no le cae bien el ron. A mi si.
5. Criollas. A mi si. Si. Si. Al Holandes tambien. Si. (si).
Yo tenia pensado dirigirme de Santiago de Cuba a Baracoa, un pequeño pueblo costero y el primero fundado en el Nuevo Mundo. Theo y Danielle habian rentado un coche e iban al mismo pueblo, asi que les pedi un aventon y estos dijeron que si. Bien! Bien? No tanto. A mi asecho llego ese enemigo bien conocido: El Coronel Diarrea. Una manejada de 5 horas se convirtio en una manejada de 7 horas gracias a mis constantes paradas. Si las carreteras de Cuba son terribles (aun peor con el paso de tres huracanes consecutivos tres semanas antes a mi llegada a Cuba), las laderas de los caminos son peores (dato verificado y constatado por mis gluteos). Señalizaciones ausentes y cuando estan, son pintadas a mano sobre hojalata y colocadas al ahi se va. Selva que se come tramos de camino. Caminos que se confunden con lodo, piedras y pedazera de asfalto. Y ahi, escondido entre la maleza, un guero, en cuclillas, aullando en torno a las copas de los arboles.
Entre parada y parada Theo me hizo una propuesta. Ellos iban a viajar dos semanas mas y salian exactamente el mismo dia que yo de La Habana. Los ultimos tres dias yo ya me los habia metido a zonas donde no van los turistas (Gracias Comite de Defensa Revolucionaria y secretaria de turismo cubana!) y le habia hecho de traductor en todo tipo de situaciones. Tambien resulta ser que nos llevabamos de pocas tuercas los tres. Asi que yo viajaba con ellos, conformando entre los tres el plan de viaje. A la misma vez, yo le hacia de traductor para ellos y en turno yo tenia transporte gratis para moverme por Cuba. Me pidieron que no me preocupara por pasarles nada de dinero y en turno yo le prometi hacerle de attachè cultural. Trato? Asi es! Trato hecho. Cual Club de Toby nos escupimos cada uno en la palma de la mano y las sacudimos vigorosamente, pactando asi dos semanas de viaje.
Pero el transporte. Que transporte! No era cualquier transporte, oh no. Era Babe! El 'cardito' valiente. El pequeño cardito de 1 litro que pudo y logró todo lo que se le interpuso en el camino. Campo traviesa? Paradas diarreicas? Ausencia de camino? Mas baches que las nalgas de Paquita la del Barrio? No importa! Babe lo puede todo! Oh Babe! Bestia sexy!
Con tratos pactados bajo el brazo, y dos aliados en la cruzada por el mitico Bergaso Cubano, llegamos a Baracoa. La señora que me hospedó en Santiago nos habia dicho que tenia un amigo en Baracoa, de nombre Rubildo (Diganlo con pasión: Rrrrrublido... eso!) que nos podia hospedar sin problemas. 10 kilometros antes de llegar a Baracoa, nos alcanza una motocicleta con dos truanes montados sobre el. La motocicleta se emparejó al auto, el pasajero de atras, con parrilla dorada por dientes, agitó los brazos, golpeó el costado del coche y gritaba con el fervor de un gordito que quiere pastel, viendome fijamente a los ojos, "Pablo! Pablo! Pablooo!!!". Ay dios! La diarrea! No, el susto! No, espera... si... no! El susto! Hice mi mejor esfuerzo por esconderme debajo del asiento mientras morbidamente disfrutaba un tanto el susto que podia ver en los ojos de Theo y Danielle. "Que soy Rubildo! Siganme a la casa!". Salude cortezmente y seguimos el resplandor de su parrila dorada de dientes.
Baracoa es pequeño, tropical y hermoso. Huele a ambiente pueblerino, y yo no podia estar mas feliz al respecto. Platicando con gente, encontramos a un arquelogo. Quien mas bien era arquelogo por hobbie y por aficion, algo que para mi horror resulta ser comun entre la mayoria de los arquelogos cubanos. Y esto no sucede por elección o gusto, mas bien por abnegación. Nuevamente se repite el patron. "No Pablo. Mira, que el gobierno solo apoya a los arqueolgos dedicados a investigar sobre la lucha revolucionaria de siglo XIX o en su caso la ultima revolucion. No les interesa nada mas." El investigaba los restos y hallazgos de los indios Tahinos. Ellos tienen de Revolucion lo que yo tengo de negro.
Llega la noche. Llega Rubildo. Llega el Ron. Llega un ejercito de amigos. Llegan tres guitarras. Llegó la fiesta! En el malecon de Baracoa, al calor del ron y la cancion, tomé mis clases de musica mexicana. Resulta que puedo tocar musica mexicana, pero mi memoria de teflon no ha logrado retener ni un solo lirico de musica mexicana. No importa. Los Cubanos me dieron clase. Cantando y bebiendo y riendo del loco paranoico de uno de los amigos de Rubildo, quien, ante la cercania de la base de Guantanamo a Baracoa y la espeluznante borrachera que se cargaba, estaba convencido de que la CDR llegaria en cualquier momento a arrestarlo y a encarcelarlo. Eventualemnte huyó despavorido al ver que se acercaba un auto cualquiera. Vaya con Dios valiente lunatico! Las cinco de la mañana y unas cuantas botellas de Ron dictaminaron que debiamos ir a dormir. Asi que despues de cantarle una serenata (de dos horas) a Danielle, cada quien se fue a romper una jerga.
La mañana siempre castiga al borracho en forma de cruda. La mañana fue bondadosa conmigo, no tanto asi con mis acompañantes. Solucion? Playa. Una larga y tendida sesion de playa virgen donde tuve la oportunidad de jugar con el primo de Babe y platicar con una señora que sufria dia y noche con el pensamiento que un desarrollo turistico les quitaria la playa a ella y su familia, playa donde ella nacio y ha vivido toda su vida. Patron, patrones, patron.
De Baracoa tocaba el largo camino de 12 horas con rumbo a Sancti Spiritus. Pedi manejar pues con solo traducir no sentia ajusticiado el enorme favor que me hacian Theo y Danielle. Especialmente despues de ver el precio de la gasolina y lo que cuesta rentar un coche en Cuba. Ademas, me moria de ganas de manejar por Cuba. Le susurre unas cositas bonitas a Babe y una vez reenamorados, me le monté y nos fuimos con rumbo a Sancti Spiritus, pasando por Camaguey. Sancti Spiritus es... Pongamoslo asi, simplemente es y está.
En el camino pasamos por varios pueblos, comimos en algun pueblo pequeño y platicamos con una señora que recordaba en orden cronologico todas las batallas de la revolucion de Fidel. Pero el trayecto yd estino ofrecia todavia mucho mas que meras conversaciones sentimentales. En Sancti Spiritus un viejo campesino pasó a mi lado regalandome un puro. Yo, feliz, acepte y nos pusimos a platicar. Primero con respecto a los puros, despues sobre cualquier cosa. El viejito intentaba vender puros ilegales que hacia, producto del tabaco que plantaba. Por diez pesos cubanos le compré un puñado de puros y nos sentamos a fumar en la plaza. Pero llegó su competencia. Un joven, negro y robusto, que se escondia detras de enormes lentes para el sol, que con un golpe en la nuca paró al viejo llamandole ladron y embustero y dirigiendose a mi, en ingles, me decia como el viejo era un embustero y que sus puros eran terrribles e ilegales. Acto seguido, me ofrecio unos cuantos de sus puros ilegales, estos robados de la fabrica de Partagás, al modico precio de 20 convertibles (casi 600 pesos cubanos... uy no...). El viejito, por fin, se defendió. Durante cinco minutos me encontré entre los dos cubanos que se gritaban, se escupian y se peleaban por mi preferencia. Mas alto y mas alto se tornaba el griterio. Mas chiquito y mas chiquito yo me hacia. La gente se comenzaba a congregar a nuestro alrededor y la policia no tardaria. Poco a poquito me fui pegando a la gente que se habia congregado y me escapé. Metiendome, con Theo y Danielle (quienes solo veian lo ocurrido boquiabiertos), entre callejones y callejuelas y por fin entrando a una iglesia no fea, horrible.
Ante la frustracion de lo que era en realidad Sancti Spiritus, huimos rapidamente a Trinidad. Sancti Spiritus es el Celaya cubano. Ni mas, ni menos. Pero Trinidad es una joya caribeña. Relegada al sur de Cuba, la musica, la arquitectura, el hogar y los Trinitarios son pura belleza y pura vida (agreguemos: chico...). Acabamos por hospedarnos en casa del gran e inmaculado Sr. Don Dr. Pollo. Hombre de enorme corazon y gigantesca panza. Al llegar a casa, de un cuarto salio una pequeña copia al carbon de Pollo. Rapidamente me vi obligado a apodarlo Capulina. El pequeño Capulina. Jo-co-coy-coy. Capulina no solo contaba chistes pelados, tambien bailaba Reggaeton! Era un estuche de monerias! Jo-co-coy-coy!
Pollo nos ofreció a pasearnos por Trinidad, bañados en Ron, como lo dicta la hospitalidad Cubana. En el bar de un amigo suyo nos sirvieron la bebida de la zona: Ron, agua, limon y miel. Una sola bastó para zumbarme los cimientos de la cabeza. Pollo, siendo el avido mediador de problemas que era, tenia una solucion. Una taza de cafe... con ron. Azucar? Leche? No. Mas ron. En el bar, otro amigo de Pollo, Don Omar, nos deleito con una muestra de musica conceptual, tocada en tambor. Yo me revolcaba de felicidad, cual niño (enano!), al ver y escuchar a Don Omar interpretar a una locomotora, a un motor sovietico, a una maquina de escribir, a un lo que sea.
Pasamos los dias en Trinidad paseando por el monte o por la playa, y de noche disfrutabamos de la musica en los bares y las plazas. Trinidad es la ciudad de musicos y musica. Los conjuntos empezaban, invariablemnte, tocando, para mi horror, musica mexicana (version tropi-salsa) pero poco a poco y sigilosamente, se introducia la musica cubana. Sabor... El ultimo dia Pollo nos ofrecio llevarnos con unos amigos de su padre que vivian en el monte.
Pollo y su familia habian sido campesinos toda la vida. Su padre y sus hermanos todavia trabajaban la tierra. Pero Pollo decidio a temprana edad dejar la tierra para convertirse en pescador de alta mar. A los pocos años, dandose cuenta que hay una enorme diferencia entre tierra firme y millones de litros cubicos moviendose bajo sus pies, regresó a Trinidad, viviendo ahora en el mismo pueblo de Trinidad. Los amigos de su padre lo conocian a Pollo desde niño. Y en sus tierras tenian una enorme cascada con una alberca natural de agua congelada (con-n-n-ngela-lada). Babe hizo los honores y nos llevo a todos. Llegamos. Nos recibieron. Platicamos. Ahi pasamos un rato, pero la ambición y la curiosidad pesa mas y nos fuimos tras loma en busqueda de la cascada. Una vez ahi, y con machete en mano, despejamos los arboles que habian caido a la alberca natural y nos dispusimos a nadar. Inmediatamente despues de saltar al agua de un pequeño risco, me dispuse a largarme del agua y dormir en una piedra. Una cosa es agua fria y otra cosa es sentir como tus testiculos huyen despavoridos al interior de tu cuerpo, con tal fuerza y velocidad que te da una tos incontrolable y te duele el paladar. Eso no es para mi. Mejor jugar a ser lagartija en una piedra. Y luego una comida deliciosa. Arroz con frijol, pollo criollo y chuletas de cerdo. Te amo chuletas. Te amo!
Si Sancti Spiritus es la Celaya Cubana, Cienfuegos es la version pirata de Tolousse, Francia. Nosotros teniamos decidido ir alli y Pollo tenia que ir a Cienguegos para comprar frutas y verduras para la familia. Asi que le dimos aventón y en el camino nos enseño la vieja empresa de mariscos para la que trabajaba y las tierras que todavia trabaja su padre. Un par de horas de camino y llegamos. Cienfuegos no es gran cosa y no ofrece gran cosa. Aun que si se lo dices a algun Cienfueguino, este dispondra a arrancarte la garganta ante tal blasfemia. Digamos que la epoca dorada de Cienfuegos huyo bajo sus propios pies hace mucho ya.
Despues de dejar y despedirnos con gran tristeza de Pollo, fuimos a una familia que nos podia hospedar en el centro de la ciudad . La casa era un caos. Gente entrando y saliendo, muchachitas medio vestidas corriendo por zapatillas y fajas y señores medio borrachos placidamente sentados en la sala viendo todo este caos a su alrededor. Escuché a uno decir mientras pasaba una amiga de la quinceañera, "Pero mira que culo, que culo!". Por Dios... En Medio de todo esto, una señora que se arrancaba los cabellos de la desesperación de no saber si llegarian a lo hora prometida para que la quinceañera, princesa de su devoción, hiciera su debut ante la sociedad Cienfueguina. Timidamente llegamos y saludamos y en menos de cinco minutos ya eramos parte del show. Una de las muchachitas me apartó (literalmente) para ser su pareja de baile en el magno evento y uno de los abuelos nos sentó para beber (que?) ron! Mas ron! Mi estomago decia "Nooo!", pero algo dentro de mi decia, "Ya vas!".
No nos habiamos ni ubicado bien en la casa, ni siquiera habiamos comenzado a conocer la ciudad, cuando ya eramos invitados de honor para los quince años, evento que se llevaria a acabo en el lujoso y majestuoso (aun que no tanto en realidad) Hotel Jagua, capricho arquitectonico espantoso que construyó el hermano de Batista. Y así fuimos, con todo y todo que estabamos harapientos y el resto de la comitiva de smokin (si, smokin) y las muchachitas vestidas de pastel de bodas. El evento vino y fue y de regreso en la casa nos esperaba mas ron y pastel. Demasiado pastel. Demasiado ron. Ya basta por favor. La señora se empeñó en que nos acabaramos hasta la ultima miga de los cinco kilos de pastel que habia sobrado mientras teniamos que soplarnos los siete albums de estudios fotograficos que le habian hecho a su nieta. Siete albums. Siete! Carajo.
A la nena le habian hecho durante un mes estudios fotograficos en Trinidad, Cienfuegos y La Habana, gastando a su vez una cantidad astronomica de dinero (y eso en sesiones fotograficas solamente). "Mira que bonito, que aun que sea atrevida la foto, se ve tan inocente", me decia la señora mientras intentaba retirar mi mirada de una fotografia donde aparecia su nieta en un bikini (y la muchahcita tenia fisico mas de boiler que de chica Hawaiian Tropic) donde no le cabia nada y se le podia entre ver absolutamente todo, hasta las ultimas penas que algun dia le viera su futuro marido. Parecia como un enorme arancel de carnes de res amarradas torpemente con mecate, y esto estaba tirado sobre la playa, sazonandose con agua de mar. Dios mio. Solo tuve suficiente valor para contestarle a la señora, "Si verdad? Que barbaro".
Paseamos por Cienfuegos, inclusive pudimos ver una obra de teatro en el teatro de Cienfuegos. "Uno de los mas importantes y hermosos," me decia un viejito en la plaza. "Mamadas," le queria contestar. Pero me contuve. El teatro es bonito, tiene lo suyo, pero no compite con otros teatros cubanos, mucho menos con el de La Habana. Ese si es un teatro de verdad.
Tomamos valor, nos despedimos de la H. quinceañera, de su impasible abuela y del crudisimo abuelo y padre y nos encaminamos, Babe bajo nalgas, a Pinar del Rio. Maravilla de maravillas. No la ciudad, pues esta es horrible, pero si la region. Aun mas espectacular pues no habian turistas. Todas las agencias de turismo y la gente en general asustaba a los turistas dicendoles que la zona de Pinar del Rio estaba en estado de pandemonio total, que era cual zona de guerra por los huracanes que le habian pasado encima y no podian entrar ni locos. Pues no es asi. Si se veia destruccioçon y ciertas carencias, pero yo no sufri, ni pase penas o hambres por esto. Tampoco ningun cubano que vivia en esta parte de la isla. Si algo bueno sale del sistema cubana, es la velocidad con la cual se recuperaba la zona. La zona inclusive habia mejorada cuando salimos de ahi con respecto a cuando entramos a ella.
Entre zona y zona no se podia evadir o evotar el tener que ir al monumento y mausoleo del Che Guevara en Santa Clara. Pasamos rapidamente, rendimos respetos y nos cagamos de la risa (asi escondiendo el asombro) de ver lo que probablemnte para mi es el mausoleo y monumento mas grande que jamas he visto en mi vida. El tamaño, las proporciones y el significado que le atribuyen es exponencialmente mas ridiculo. Pero, aun obstante, es impresionante y de enorme significado. Que pensaria Guevara si viera este monumento y todos los recursos que se le inyectan a el?
Me habia hecho de la mision de manejar cuanto pudiera a Babe. Y esto practicamente fue logrado por mi parte. Era feliz con Babe y Babe lo era conmigo. Para ir a Pinar del Rio hay que darle la vuelta a Habana. Hay que recordar lo siguiente, los caminos estan hechos con las patas. La unica autopista de verdad esta cerca de La Habana. Esta fue construida con dinero sovietico. Se comenzo a construir en el '87. El plan era que cubriera toda la isla, pero con la caida del muro de Berlin, asi tambien cayeron los fondos. Asi que se tiene una carretera corta, mal hecha, mal mantenida y cortada en segmentos. Esto es aun mas obvio al intentar darle la vuelta a La Habana, donde la autopistra se segmenta en cinco porciones distintas, cada una mas alejada de la anterior. Por mas que intentamos, no pudimos dar con las salidas para Pinar del Rio, pues ademas de estos terribles caminos, el cubano no se ve en la necesidad de contar con cosas tan lujosas como señalizaciones e indicaciones para como llegar a las ciudades. Resultado? Nos perdimos en el barrio de Marianao. El barrio mas peligroso de La Habana. El hecho de que ya fuera de noche no nos alentaba a permancer ahi en lo mas minimo.
Prendimos veladoras y pusimos nuestros santitos de cabeza. Carajo. Eso no sirvio. Pero lo que si sirvio fue preguntarle a un malandro que nos indico como salir a la carretera a Pinar del Rio. Nos empeñamos en salir y no tardamos mucho en darnos cuenta que no le habiamos entendido un carajo a sus indicaciones. Pero por lo menos ya no estabamos en Marianao. Pero ahora estabamos en el aeropuerto. Preguntamos mas veces y nada. Despesperado, obligue a un señor a que me dibujara un croquis. No sirvio. Pero de repente, como milagro del señor, y sin entender como, dimos con la carretera. Alabado seas Babe que en los caminos del Señor nos mantienes!
Paramos en un pequeño pueblo de montaña y nos quedamos con una señora que tendia su campo y conjuraba (con enorme tristeza) maldiciones al gobierno y las limitantes por medio de las cuales el gobierno contralaba su tierra, su cultivo y su ganado. Pero ante todo, ella y su familia eran alegres y joviales y nos contaban sobre los huracanes y la vida en la montaña. Dandonos cuenta del poco tiempo que nos quedaba, dejamos el proximo dia el pueblo, prometiendo a la señora que regresariamos en nuestro trayecto final hacia la Habana. Entramos y huimos de Pinar del Rio, la ciudad. Es horrible la ciudad. Aun asi decidimos pasar por la fabrica de mi vieja y favorita amante, Guayabita del Pinar. En la fabrica, donde les extrañó que un puñado de gueros llegara a ver la fabrica y no la fabulosa tienda de regalos (fabulosa?), nos regalaron mas Guayabita del Pinar del que puede sostener una sola vejiga y nos mostraron todas las instalaciones. Algo aguayabados (pues es un agua ardiente fuerte, algunos dirian ilegal), nos escapamos de Pinar del Rio, a sabiendas que abandonabamos la maravilla que es Guayabita del Pinar.
En un puqueño pueblo al norte de Pinar del Rio, llegamos, cabalgando a Babe y resplandecientes frente al manto del atardecer montañes. Heroicos. Dormimos en casa de una señora negra, criolla, vieja y gorda. Quien ademas tenia mas barba que yo. Hay una regla que he formado. Entre mas negra, mas gorda y mas vieja es una señora, mas rica es la comida que cocina. El factor barba es un plus que no afecta en lo mas minimo los otros factores. Comimos como reyes esos dias que pasamos ahi y despues, teniendo el amor de Babe, a mi amante Guayabita, las (los?) traicione a todas con Rayon.
Caminando por el monte nos topamos con un joven campesino con quien platicamos y nos prometio prestarnos unos caballos la proxima mañana. El nos acompañaria y nos llevaria a unas cuevas donde se podia nadar. Platicamos tanto que se nos fue la hora y perdimos la cuenta del tiempo. Era ya tan tarde que nos vimos obligados a caminar a tientas en el campo, intentando buscar nuestro camino de regreso al pueblo. No habia luna, estaba nublado y el cansancio se hacia notar en nuestro paso y desesperacion. De una casa escuchamos gritos que nos invitaban a pasar. Era un campesino, su mujer, su compadre y su hija. Iluminados con velas y una lampara, bebimos cafe y ron, fumando los puros hechos con el tabaco que cosechaba el campesino y dandonos cuenta de que el regreso al pueblo se hacia cada vez mas imposible. El campesino nos invito a dormir en su casa, tras remilgar un poco aceptamos, y asi nos quedamos hasta las tres de la mañana platicando, otorgrandonos apodos, fumando, tomando y para no perder costumbre, cantando canciones de Juan Gabriel y de Marco Antonio Solis.
Resultó ser que el campesino era tio del joven que nos habia prometido los caballos el dia anterior. A las seis de la mañana nos encontramos con el pasando frente a la casa y ahi, frente a mi, con ojos coquetos y un relinchido celestial, Rayon me esperaba. En el camino para las cuevas Rayon intentaba al mas minimo descuido dispararse corriendo. Lo jalaba y lo mantenia a regla para poder caminar a trote tranquilo y poder disfrutar de mi puro y del paisaje. En las cuevas, caminando cientos de metros a su inteior, llegamos a unas albercas naturales que clamaban por mi. Me rogaban y me pedian a gritos que nadara en ellas. Asi que obedeci. Fresco, bañado y anhelando a mi Rayon, salimos de las cuevas y comenzamos el camino de regreso, ahora por lo menos sabiamos que llegariamos hasta el pueblo. Pero yo ya habia visto todo lo que queria del paisaje y Rayon seguia pidiendo correr. Pues bien. Arranque una ramita de un arbol, me acomode mi puro, acomode mis puros, solte la rienda y golpee a Rayon en sus nalgas. A correr señores! Rayon y yo corriamos por los caminos, nos metiamos a los campos, pasabamos por sobre rios y charcos y el dia siguiente mis piernas y entre piernas me lo agradecieron en forma de un punzante y terrible dolor. Yo en cambio se la regrese al dolor dopandome a la coronilla con desinflamatorios y analgesicos. Dios te bendiga medicina moderna! Mi despedida de Rayon fue triste, aun que tal vez no hubiera sido tan triste de haber sabido del dolor que me esperaba dentro de unas horas.
Tocaba irse de Cuba. De regreso a La Habana, pasamos nuestra ultima noche con la señora que le habiamos prometido regresar. Nos recibieron con brazos abiertos y cenamos como realeza. Para ese momento todos los medicamentos ya me habian surtdio efecto, asiq ue yo estaba mancito y cooperativo con lo que se me dijera y pidiese. Esa noche pude ver el analisis politico de las elecciones estadounidenses. De todos los lugares donde me imaginaba viendo un analisis politica de las elecciones gringas, el ultimo huberia sido Cuba. Pero ahi estaba, viendo la tele con el amrdio y el hijo de la señora, con un analisis politico extraordinario y probablemente uno de los mejores que he vsito en mi vida. Aun asi no podia dejar de pensar en la banderita cubana que habia frente al locutor.
Cuba llegó a su fin y llegamos al aeropuerto Jose Martí. Envueltos en un tumulto de Hindus y Japoneses que tomaban 50 fotos por minuto por todo el aeropuerto, me despedi con gran tristeza de Theo y Danielle. Me dieron mis cinco minutos a solas con Babe y les hice prometerme que cuidarian bien a Babe estas ultimas horas que ellos se quedaban con el (ella?). Theo y Danielle aprovecharon su sultimas horas en pasear a Babe por el Parque Lenin y yo aproveche mi ultima hora viendo a un Hindu acosar sexualmente a una horrible pelirroja neozelandesa (de esas decrepitas mujeres de pechos firmes, piernas largas y rostros en harmonia). Go Hindu! Go! Y que me llevo de Cuba? Bueno, pues tal vez este graffiti que encontre en un castillo abandonado al que nos metimos el ultimo dia en Cuba pueda resumir mi pensar.
Cuba se acabó y mi tiempo en el internet cafe tambien. Bergolicos mios! En su proxima sesion Bergolicos Anonimos habra mas sexo, agruras y emocion! Descubran como caminar sobre toneladas de basura disfrazadas de playa! Admiren la proeza de atravezar palmares indundados! Preguntense como es posible Honduras le gana a Mexico en el futbol! Se despide su corresponsal, desde Honduras rumbo a Nicaragua.
Petición: Denle hartos clicks al google ads de hasta abajo de la pagina... andenle... si? Andenle.
Gracias: Muchisimas Theo y Danielle. Por todo.
